Sacarle partido a una tableta no es sólo utilizar aplicaciones para mirar a su pantalla si no que son herramientas que sirven de controladores de otros aparatos. Hoy os queremos hablar de coches teledirigidos por un iPad o una tableta Android. Casi todos ellos precisan solamente de una conexión o WiFi o, en algunos un conector para infrarrojos y por su
Hoy os vamos a hablar de tres tanques espías que se pueden controlar con aplicaciones y mediante WiFi con las dos plataformas móviles tanto con tabletas como con móviles.
El modelo más conocido es el Rover Spy Tank desarrollado por la empresa americana Brookstone y que ya tiene una segunda versión mejorada. La primera versión de este vehículo ya está un poco trasnochada y echa en falta algunas de las funciones que sí tienen sus competidores y el Rover Spy Tank 2.0. Por la forma de moverse es claramente un tanque, no tiene mucha velocidad, avanza en e línea recta hacia adelante o hacia atrás y gira 360 sobre su eje vertical desde parado. Cuenta con una cámara frontal cuyo ángulo se puede ajustar manualmente y con la cual podemos ver por donde se mueve el tanque. Tiene visión nocturna por infrarrojos. Con ella podemos tirar fotos también. Tiene un micrófono que no permite oír lo que ocurre a distancia. Se controla con una interfaz sencilla en la que vemos unos simples mandos aunque también podemos poner el g-sensor y controlarlo con movimientos. Sólo vale para iOS pero vale 80 dólares más gastos de envío.
El Rover Spy Tank 2.0 es la segunda versión del anterior y ya cuenta con una aplicación también para Android e incluye algunas de las novedades que se vieron en los imitadores y competidores de la primera generación. El grado de inclinación de la cámara es ajustable desde la propia app y podemos grabar vídeos y compartirlos por redes sociales, siempre que esté a la red local de WiFi, al igual que la tablet. Además de grabar sonido, también tiene un altavoz con el que hablar a otras personas a distancia. En este caso, el precio se dobla llegando a los 149 dólares más gastos de envío.
Aquí está el enlace a la app para iOS y el de para Android.
i-Spy Tank de Happy Cow es la versión china del anterior e incluye todas las funciones del anterior. Su diseño es incluso más bonito y la grúa que controla el grado de inclinación de la cámara es realmente atractiva.
El software que utiliza necesita de una red WiFi también para funcionar. En este caso la opción de compartir los vídeos viene desde fuera de la aplicación y su cámara no vale para visión nocturna. Tiene un precio mejor que el anterior, sólo 80 dólares en esta web, aunque la aplicación del modelo anterior parece funcionar mejor según la mayoría de usuarios tanto de Android como de iOS. Puedes conseguirlo en otras webs españolas por unos 100 euros.
Aquí están los enlaces a la app para iOS y a la de Android.
Por último, está el Spy C Tank de la empresa francesa Logicom que parece haber aprendido todas las lecciones de los dos anteriores y reúne todas las funciones atribuibles al Rover Spy Tank 2.0, incluso hasta la visión nocturna. También podemos capturar el audio independientemente del vídeo. Igualmente todo lo que captemos y guardemos lo podemos compartir por redes sociales.
Su forma de girar no es tan rígida como la de los otros dos y es bastante más rápido.
Se puede manejar tanto con una aplicación para iOS como para Android, teniendo una versión para dispositivos con la versión 3.0 o superior o 2.3 o 2.2.
Además de estos curiosos tanques. Hay muchos otros tipos de coches teledirigidos que no espían necesariamente y que se controlan tanto por Bluetooth como por adaptadores de infrarrojos como por redes WiFi pero de eso os hablaremos otro día.