La prensa especializada reconoció, prácticamente en consenso, al HTC One como el mejor smartphone de 2013, mientras que el One M8 parece haber iniciado una brillante trayectoria similar en el poco tiempo que ha transcurrido desde su presentación. La firma taiwanesa, sin embargo, no para de perder cuota de mercado y sus finanzas se desploman trimestre tras trimestre. La tabla de salvación pueden ser los modelos Desire 610 y Desire 816.
Android Authority ha publicado un interesante artículo en el que se analiza la actual posición de HTC en el mercado global y el punto por el que pasa la recuperación de la firma en términos comerciales. Indiscutiblemente, sus últimos gama alta, el HTC One de 2013 y el HTC One M8, son equipos diseñados con un cuidado especial y señalados por muchos usuarios y expertos como dos de las más grandes piezas de tecnología móvil en los últimos tiempos.
Aún así, esta compañía acumula una cuota similar a la de Xiaomi, una startup fundada hace tres años que opera oficialmente sólo en 3 mercados.
La línea Desire es clave para conquistar los mercados emergentes
Con los Desire 816 y 610, al fin HTC tiene productos capaces de encontrar un hueco importante en los mercados emergentes, donde normalmente triunfan la gama de entrada y los gama media.
A muchos puede resultarle extraño que Samsung lance tantos smartphones al cabo del año, sin embargo, la compañía coreana líder del mercado, no hace sino segmentar y amoldarse así a las demandas de muy diferentes nichos.
En ese sentido, ni siquiera HTC One Mini, a pesar de contar con un gran diseño y prestaciones de alto nivel, era una opción realista, puesto que se trata de un terminal pequeño y relativamente caro. Mucho más acertado es el planteamiento de los Desire, con un phablet, el 816, que en su día consiguió más de un millón de pre-reservas en China, y un equipo de tamaño más proporcionado, el 610, como producto de referencia.
Hay que tener en cuenta que el usuario de China o La India demanda un dispositivo a precio más o menos módico, que le proporcione un área de trabajo suficiente para realizar las tareas que lleva a cabo con un ordenador, mientras que los acabados, los materiales o las especificaciones de vértigo no son una prioridad fáctica.
La función el HTC One está quizás más orientada a los beneficios, no económicos, si no en términos prestigio, para reforzar al resto del catálogo.
Fuente: androidauthority.com