Ya os hemos hablado antes de la difícil situación por la que está pasando el mercado de las tablets, y por extensión los fabricantes de estos dispositivos que se están viendo obligados a buscar nuevas alternativas de negocio. Un informe presentado por la firma analista IDC esta semana pasada estima un descenso en las ventas de tablets para 2015 del 8%, una caída mucho más abrupta que la sufrida 2014, cuando apenas fue del 3,8%. Esta cifra se produce a pesar de que los dispositivos 2-en-1 casi duplicarán sus ventas, ¿por qué? ¿qué efectos puede tener esto a largo plazo? ¿se acercan las tablets hacia el PC?
El sector empresarial y las tablets productivas serán la clave de este mercado para los próximos años. Una afirmación que expertos y analistas han repetido hasta la saciedad en los últimos meses y que parece confirmarse con el paso del tiempo. El informe que mencionábamos de IDC prevé un notable descenso en los envíos de tablets (en general) en 2015, pero los 2-en-1 ganarán en importancia, de los 212 millones de unidades que se venderán, 14,7 millones se encuadrarán en esta categoría que crece un 86,5% respecto al curso anterior.
Pero no solo eso, el número de vendedores de productos 2-en-1 pasará a ser de apenas 10 en 2014 a 40, cuatro veces más. Entre estos nuevos fabricantes podrían estar algunos ilustres como Apple con el iPad Pro. La consecuencia directa de todo esto es que los retos que debían solucionar los 2-en-1 para despegar, se están alcanzando. La mayor competencia está provocando una reducción de precios, Windows 10 sustituye al poco demandado Windows 8 (sistema operativo que ejecutan la mayoría de modelos) y los diseños poco atractivos están dando paso a equipos mucho más cuidados en el plano estético. En definitiva, hemos entrado en un ciclo de realimentación donde a más fabricantes implicados, mejores productos salen al mercado, las ventas crecen y por tanto, más fabricantes se interesan por los 2-en-1.
El impacto de los 2-en-1 en el mercado
Esto está acercando las tablets al PC. Al fin y al cabo, los 2-en-1 no son más que tablets con capacidad para hacer las veces de ordenador o portátiles convertibles en tablet por diferentes mecanismos. Las consecuencias, lejos de ser beneficiosas para el mercado, pueden tener implicaciones negativas y la explicación es sencilla. Hasta ahora nos movíamos en un marco donde los smartphones llegan hasta las 5 pulgadas, los phablets cubren de 5-5,5 a 7 pulgadas, las tablets de 7 a unas 12 pulgadas y a partir de ahí entraban los portátiles. Los 2-en-1 se han establecido entre 10 y 17 pulgadas, y esta es la primera clave.
Con los phablets comiendo terreno por abajo (las tablets compactas no han desaparecido, pero han sufrido un descenso brutal) y los 2-en-1 mordiendo por arriba, las tablets “convencionales” se quedan con un rango demasiado estrecho en el que moverse. Es por esta razón que cada vez son más habituales las tablets de 8 y 9 pulgadas, porque es el único territorio que aún conservan en exclusiva. ¿Quiere decir que las tablets consideradas de gran formato pueden desaparecer? No necesariamente, pero sí que podrían tener un futuro similar al tablets compactas, a esto es a lo que nos referíamos cuando decíamos que el impacto podría ser negativo.
Un ejemplo para entenderlo mejor. Nos ponemos en la siguiente situación, vas a comprar una nueva tablet y quieres un modelo de pantalla grande que te pueda servir para algo más que tu smartphone, miras entonces dispositivos de 10 o más pulgadas. Te encontrarás en la tesitura de tener que elegir entre tablets tipo Sony Xperia Z4 o Samsung Galaxy Tab S 10.5 y tablets como Surface Pro 3 que a pesar de ser un poco más caras (no demasiado), las superan con creces en rendimiento y posibilidades a la hora de trabajar con ellas. Actualmente puede que tuvieras más dudas, pero con la evolución de los 2-en-1 que exponíamos anteriormente, la mayoría se decantará por la segunda opción, ¿cierto? (Podéis dejar vuestra opinión).
En definitiva, el “Boom” de 2010 que se ha mantenido casi un lustro con las tablets experimentando un ascenso meteórico se ha apagado y el mercado se está reestructurando en busca de un modelo de negocio que pueda ser sostenible a largo plazo para las marcas implicadas. Parece complicado que phablets, tablets, 2-en-1 y PCs puedan seguir conviviendo con el planteamiento actual, por lo que solo queda esperar y ver como cada uno va encontrando su sitio dentro de una industria tecnológica capaz de cambiar radicalmente en muy poco tiempo.