Richard Graham, un médico británico, ha puesto en marcha un programa para ayudar a menores “enganchados” a las nuevas tecnologías. Lo sorprendente de todo esto es que la persona más joven de las apuntadas a su programa suma sólo cuatro años y muestra algunos de los síntomas que se pueden experimentan con el síndrome de abstinencia a determinadas drogas, sólo que la droga, en esta ocasión, es un iPad. Os damos los detalles del caso.
Un aspecto muy a tener en cuenta acerca de los aparatos tecnológicos destinados al ocio y entretenimiento, entre muchas otras cosas, es la adicción que puede provocar en el usuario. El tema se vuelve especialmente grave cuando las conductas adictivas se manifiestan en menores, siempre vulnerables y sin la capacidad de autocontrol o raciocinio suficientemente desarrollada como para darse cuenta de lo nocivo de ciertos comportamientos. El caso extremo, como os decimos, lo encarna esta pequeña de cuatro años que actualmente se encuentra en terapia de desintoxicación.
Lo cierto es que el iPad y las demás tabletas pueden ser herramientas educativas particularmente eficientes. Está demostrado que cuando los pequeños aprenden jugando y no sintiéndose obligados, tienen una predisposición infinitamente mayor. Por eso hay tanta aplicaciones orientadas al aprendizaje que puede resultan ser un complemento acertado a la educación más clásica. No obstante, ya sabemos que en el término medio está la virtud, y una sobre-exposición sin límites ni pautas puede hacer que los pequeños acaben enganchados de manera insana. Cosa lógica puesto que también ocurre con los adultos.
En CNET explican que la niña de 4 cuatro años jugaba con el iPad unas 4 horas al día, una cantidad de tiempo disparatada si tenemos en cuenta que la mayoría de menores de esas edad están despiertos aproximadamente 10 horas, lo que supone casi la mitad de su tiempo. Según comenta el doctor Graham, la joven pedía el iPad a sus padres compulsivamente y reaccionaba con berrinches y un comportamiento incontrolable, fuera de lo común, cuando se lo retiraban.
Pura demagogia y sensacionalismo. Lo primero es que un niño de 4 años está más de 10h despierto… lo segundo es que tienen rabietas y llantos por cualquier cosa que se les niegue (está en su desarrollo evolutivo) y lo tercero es que seguramente los que necesiten ayuda sean sus padres, pero no por adicciones, sino para que sepan educar a sus hijos. Esto te lo dice cualquiera que tenga o haya tenido un niño con 4 años.
Estoy completamente de acuerdo con Javier, no creo que la tecnologia sea tan mala pero como todo a esa edad tiene que estar controlado por los padres. ¿O alguien le daria a un niño de 4 años una bolsa de chuches de 2 Kg. y le dejaria comer tanto como quisiera?