Según un rumor que recoge Sam Mobile de la prensa coreana, Samsung está poniendo a prueba nuevos sensores para la cámara y así introducir tecnologías OIS en el nuevo Galaxy Note III, el cual será presentado presumiblemente en el IFA de Berlin en julio. Esta tecnología ha sido integrada en un teléfono móvil por primera vez en el Nokia Lumia 920 y busca corregir el desenfoque que producen las vibraciones que se transmiten a la cámara cuando la agarramos de manera inestable, por mal pulso o cuando tiramos una foto en movimiento.
OIS se corresponde con Optical Image Stabilization, que significa en castellano estabilización óptica de imágenes. Son una serie de técnicas basadas en la manipulación de la lente para que no se vea tan afectada por el movimiento y salgan las fotos borrosas. Desde los años 60 se viene utilizando giroscopios que permiten decidir cuánto debe moverse la lente o el sensor para corregir esos movimientos indeseados. Estas tecnologías se encuentran en cámaras de fotos y vídeo profesionales de las grandes marcas.
Estas técnicas se contraponen a las de estabilización digital de imágenes que hace un proceso de la información sometiéndola a filtros previos o posteriores, modificando los encuadres o simplemente reduciendo el tiempo de exposición.
En el caso de la phablet de Samsung se podrían combinar ambos. En muchas ocasiones medimos la calidad de las cámaras basándonos en el número de megapíxeles, que en esta cámara llegarían a 13 MPX. Pero éstos sin estar acompañados de una buena óptica y de un buen software de procesamiento de imágenes valen para poco. Si a esto lo sumamos ayudas de carácter mecánico, ganaríamos mucho.
Además de estos sistemas de estabilización, se dice que también veremos diferentes opciones de disparador lo que también podría beneficiar a la calidad de las fotos.
Hace unos días vimos en Tailandia un Nexus 4 con Android 4.3 con una nueva aplicación de cámara que permitía poner temporizador en el disparador. Por ahí podrían ir los tiros.
Fuente: Sam Mobile