Por fin vemos una apuesta distinta en el superpoblado mundo de las tablets Android low cost de 7 pulgadas, donde prima la mediocridad y la repetición. La Lenovo S5000 no varía demasiado en cuanto a especificaciones pero sí en cuanto a diseño, con un diseño muy estilizado y un acabado con toques metálicos y texturas especiales casi inéditos en este sector de mercado.
Si repasamos sus especificaciones técnicas, veremos que los puntos de diferenciación son pocos pero vitales en el uso y en la vista.
Especificaciones técnicas
Su pantalla de 7 pulgadas tiene la clásica resolución de 1280 x 800 píxeles y gasta un panel IPS. En su interior tiene un chip MediaTek MT8389 con procesador de cuatro núcleos Cortex-A7 de bajo consumo a 1,2 GHz. Su sistema operativo es Android 4.2 Jelly Bean.
Tiene 1 GB de RAM y 16 GB de memoria de almacenamiento ampliable por el USB OTG.
Cuenta con dos cámaras, siendo la trasera de 5 MPX y la delantera de 1,6 MPX. Su conectividad pasa por el WiFi aunque se puede elegir un modelo con conectividad 3G por HSPA+. También cuenta con Bluetooth 4.0 y GPS integrado.
Tiene una batería de 3.450 mAH que le dan una autonomía de 8 horas.
Un diseño distinto
Hasta aquí es un equipo normal, con sus altos y sus bajos. Sin embargo, es en el acabado en lo que destaca. Su carcasa es de elegante con partes cromadas y una parte trasera que se ha acabado con láser para darle un tacto de tela.
Sorprende su finura, tan sólo 7,9 mm de grosor, siendo la tablet Android de 7 pulgadas más fina del mercado. También es una de las tablets más ligeras del mundo, con tan sólo 246 gramos. Esto es unos 40 gramos menos que la nueva Nexus 7.
Lo mejor, como en casi todos los productos de Lenovo, es su precio. La S5000 tiene un precio de salida de 199 euros. El modelo con 3G será un poco más caro. Se espera que lleguen a las tiendas antes de que acabe el año.
Fuente: Lenovo