Ya tenemos los últimos datos de Google sobre la evolución de la adopción de las últimas versiones de Android, confirmando la continuidad de las positivas tendencias que se habían empezado a observar en los últimos meses: al fin una amplia mayoría de usuarios utiliza Jelly Bean y, poco a poco, KitKat empieza a hacerse un hueco también.
El hecho de que Jelly Bean haya estado recibiendo actualizaciones durante más de un año (en lugar de saltar a una nueva versión) ha funcionado bien para Google y, a pesar de que la llegada de KitKat supone un nuevo foco de fragmentación, al menos se ha conseguido que la mayor parte de los usuarios dispongan de una versión de Android bastante actualizada y que el hasta hace no mucho mayoritario Gingerbread siga perdiendo peso.
Jelly Bean está ya en casi el 60% de los dispositivos
Jelly Bean sigue creciendo de forma lenta pero imparable: si en los datos correspondientes al mes de noviembre nos encontrábamos con casi un 55% de adopción, en los datos de diciembre podemos comprobar que se encuentra ya en prácticamente el 60% de los dispositivos Android. Si comparamos estas cifras con las de mediados del año pasado la evolución es evidente: el número de dispositivos con Jelly Bean ha estado cerca de doblarse desde junio de 2012 (33%).
KitKat aún no llega al 2%
Las noticias no son tan positivas si pensamos en la última versión de Android lanzada por Google, Android 4.4 KitKat, que aún no ha llegado siquiera al 2%, aunque comparando con los datos de noviembre vemos que ha empezado ya a crecer (ha pasado del 1,1% al 1,4%). Tampoco es de extrañar, en cualquier caso, si tenemos en cuenta que Android 4.3, presentada el pasado verano, aún está en menos de un 10% de los dispositivos, si bien su tasa de adopción ha aumentado casi 4 puntos en un solo mes.
Fuente: developer.android.com