HP nos ha puesto al tanto de un proyecto que podría generar cambios importantes en el mundo de la tecnología los próximos años. “The Machine”, que es como lo llaman, busca cambiar completamente la arquitectura de los equipos actuales incluyendo una transferencia de datos ultrarrápida y un tipo de memoria diferente que podía lograr que un smartphone almacenara volúmenes de datos de hasta 100 TB, según explicaba Matin Fink, director de tecnología y de los laboratorios de la compañía en una conferencia.
Las arquitecturas que se utilizan actualmente, desde smartphones, PCs hasta los supercomputadores, no pueden seguir la evolución de las necesidades de almacenamiento y cálculo según HP, de ahí que tras asumir Fink el cargo que ocupa actualmente hace un par de años, decidieran embarcarse en este prometedor proyecto, que buscar rediseñar la informática y las tecnologías actuales desde cero. Aunque ahora parezca una idea un tanto descabellada, lo cierto es que hace apenas una década, para la propia HP, IBM o Suns Microsystems no lo era.
Uno de los objetivos que se marcaron con “The Machine” es reemplazar los diferentes tipos de memorias que se utilizan hoy día en una sola memoria universal: “Ahora mismo, todos los dispositivos utilizan tres capas de memoria: la que se necesita en este instante, SRAM, la que se necesitará muy pronto, DRAM y la que se puede necesitar más adelante, almacenamiento, la nueva memoria, basada en memristores será lo suficientemente rápida, densa y barata como para jugar el papel de todas ellas, aumentando por tanto el rendimiento mediante la eliminación de la mayoría de los de aquí para allá”. Este tipo de memoria, que todavía está en plena fase de investigación, utiliza iones en lugar de electrones para representar los 1s y los 0s de los sistemas informáticos.
Cuando se refieren a suficientemente densa, apunta Fink: “Queremos que usted sea capaz de almacenar toda su vida, piense en un smartphone con 100 TB, eso es más de mil veces el almacenamiento actual de un iPhone 5s”. Además, los objetivos no quedan ahí, y estarían diseñando nuevos procesadores y chips pensados para esta arquitectura, que estarían interconectados mediante fotónica de silicio, es decir, usando la luz en lugar de cables, lo que habilitaría transferencias de datos a velocidades que podrían alcanzar los 6 TB por segundo.
En un plazo que va desde los próximos tres años al final de la década veremos los primeros resultados. Existen ciertas dudas, pero el esfuerzo y los recursos que están dedicando a este proyecto, entre los que se encuentran el 75% del personal de los laboratorios, les obliga en cierta manera a obtener algo positivo, de lo contrario, podría ser muy perjudicial para la empresa: “Creemos que no tenemos otra opción” declaró Fink.
Fuente: CIO