El pasado jueves pudimos conocer al fin los dos nuevos y esperados phablets de Samsung, el Galaxy S6 edge+ y el Galaxy Note 5, pero, como os desafortunadamente os teníamos que contar apenas unas horas después de su debut, parece que en Europa, como mínimo, vamos a tener que esperar para poder hacernos con él, y la peor parte es que ni siquiera sabemos cuánto. Esta mala noticia sin duda os habrá llevado a muchos de los que estabais impacientes por comprarlo a considerar otras alternativas y, afortunadamente, no faltan buenas opciones. Os presentamos las que nosotros hemos considerado más interesantes.
Galaxy Note 4
Por supuesto, esta no vale para aquellos que ya lo tenían y que lo querían era hacerse con el nuevo modelo, pero para todos los demás, especialmente si sois fanáticos del S Pen, es probablemente la mejor opción. Hay que pensar que, de hecho, el Galaxy Note 5 no ha supuesto una evolución tan radical con respecto a su predecesor, salvo en lo que respecta al apartado de diseño e incluso en este caso, el no poder disfrutar del cristal y el metal de la nueva generación tiene una compensación importante: poder seguir disfrutando en cambio de la ranura para tarjeta micro-SD y de la batería extraíble. Por lo demás, tendremos aún una pantalla Quad HD de 5.7 pulgadas, una cámara principal de 16 MP y otra frontal de 5 MP y un mínimo de 32 GB de capacidad de almacenamiento (pero ampliable de forma exterior, como decíamos). En lo que más salimos perdiendo es en el apartado de rendimiento, pero tampoco se le pueden poner demasiadas pegas a un Snapdragon 805 y a 3 GB de memoria RAM. No nos sorprendería, además, que tuviera incluso una mayor autonomía ya que, de entrada, su batería es de más capacidad, aunque habrá que esperar a los tests de autonomía para comprobar si la mayor eficiencia del Exynos 7420 puede compensarlo. Y a todo esto, hay que sumar que su precio ahora puede bajar incluso de los 600 euros, dependiendo del distribuidor.
Galaxy S6 edge+
Otra recomendación evidente es el Galaxy S6 edge+, el otro phablet que Samsung nos presentó este jueves y que al fin y al cabo es por completo idéntico al Galaxy Note 5 en lo que a especificaciones técnicas se refiere: la misma pantalla Quad HD de 5.7 pulgadas, las mismas cámaras de 16 y 5 MP, y también en este caso, el mismo procesador Exyos 7420 y los mismos 4 GB de memoria RAM. Las principales diferencias están en el exterior (aunque los dos utilizan la misma combinación de cristal y metal) y es cierto que no se les puede restar importancia, porque tienen que ver sobre todo con cómo usamos nuestro dispositivo: si estamos acostumbrados al S Pen y sus funciones especiales probablemente contar con las de la pantalla curva de este modelo no nos sirva de demasiado consuelo. Si lo más importante para nosotros de la gama Galaxy Note es la calidad de los dispositivos, no obstante, el Galaxy S6 edge+ tiene todo lo que buscamos.
Moto X Style
Desafortunadamente para Samsung, hay otros fabricantes que tienen también grandes alternativas al Galaxy Note 5, y la mejor hasta la fecha es sin duda la que nos presentó Motorola hace apenas unas semanas: el Moto X Style. Puede que en algún apartado se quede algo por detrás de él, como puede suceder con el de rendimiento, pero, al igual que con el Galaxy Note 4, la diferencia está lejos de ser abismal, ya que cuenta con un Snapdragon 808 y 3 GB de memoria RAM. Por lo demás, la pantalla es también de 5.7 pulgadas y con resolución Quad HD y las cámara principal es incluso más potente, con 21 MP (la frontal es de 5 MP). La batería es también de 3000 mAh y para el tamaño de su pantalla tiene la virtud de ser un dispositivo bastante compacto. Lo mejor de todo es que será incluso más barato que el Galaxy Note 4, con un precio que se espera que ronde los 500 euros.
LG G4
Aunque LG nos ha prometido un dispositivo super premium en esta segunda mitad del año y quizá os interese incluso esperar a ver de qué se trata, si lo que queréis es justo al revés, elegir un phablet ya, el LG G4 se merece también entrar en la lista de dispositivos a tener en cuenta. Es un caso bastante similar al Moto X Style: es un dispositivo bastante compacto, con pantalla también con resolución Quad HD (aunque más pequeña, ya que se queda en este caso en las 5.5 pulgadas), una batería igualmente de 3000 mAh, y algo mejor incluso en el apartado de cámaras (la principal es también de 16 MP, pero la frontal es de 8 MP), aunque se queda un paso por detrás en rendimiento, también con un Snapdragon 808 y 3 GB de memoria RAM. El hecho de tener un buen precio de partida y que haya pasado ya algún tiempo desde su lanzamiento hace que su precio sea aún incluso más bajo, ya que hay distribuidores donde se puede conseguir por menos de 500 euros.
Xiaomi Mi Note Pro
También Xiaomi tiene una alterna al Galaxy Note 5 digna de consideración, que por supuesto no es otra que el Xiaomi Mi Note Pro. De hecho, en especificaciones técnicas, esta es, después del Galaxy S6 edge+, probablemente la más similar: su carcasa es también de cristal, la pantalla de 5.7 pulgadas y con resolución Quad HD e incluso nos ofrece también 4 GB de memoria RAM. Se parece hasta en los rasgos menos positivos, como la falta de ranura para tarjeta micro-SD. Las principales diferencias son que en lugar de un procesador Exynos tenemos un Snapdragon 810 y que la cámara principal es de “sólo” 13 MP. Sí que hay que tener en cuenta, en cualquier caso, que hacerse con él es algo más complicado al tener que comprarse importación, y que conviene comparar precios (que varían bastante de un importador a otro) y comprobar garantías.
OnePlus 2
Siguiendo con los fabricantes low-cost asiáticos y para terminar, no podemos dejar de recomendar que aquellos que estén considerando otras opciones aprovechen para abrir su mente un poco más y tomar en consideración los nuevos phablets de gama media que han visto la luz este año y que cada vez tienen una mejor relación calidad/precio, especialmente para aquellos que hacían la inversión que supone un Galaxy Note un poco a regañadientes. Hay muchas buenas opciones y en realidad sólo hemos destacado al OnePlus 2 por ser quizá el más popular y por poner el listón un poco más alto, pero empieza a ser bastante fácil conseguir un phablet con pantalla de al menos 5.5 pulgadas con resolución Full HD, un procesador de ocho núcleos, 2 o 3 GB de memoria RAM y ćámara de unos 13 MP por entre 300 euros y 400 euros. Algunos de ellos, incluso, se permiten prescindir del plástico y lucen carcasa de cristal y metal también.
