¿Actualizando tu tablet? No te olvides de repasar estos puntos

Las actualizaciones de los sistemas operativos son elementos muy útiles que en la mayoría de los casos, son esperadas durante mucho tiempo por millones de usuarios. Con estas nuevas versiones en el caso de Android, no solo se intentan solucionar fallos históricos en materia de seguridad, sino que también, se intenta dar más libertad al público a la hora de personalizar sus terminales con la inclusión de nuevos temas o la positiblidad de modificar las interfaces. Al mismo tiempo, se pretenden satisfacer las demandas del público en aspectos que también incluyen una mejora en la gestión de los recursos, y una optimización tanto de la batería como de las propias aplicaciones.

Sin embargo, actualizar nuestras tablets y smartphones no es algo que deba realizarse a la ligera como si se tratara de una app ya que antes, debemos asegurarnos de que nuestros dispositivos son totalmente compatibles y se garantiza que tras la instalación del nuevo software, el terminal funcione mejor. A continuación os decimos todos aquellos pasos que no debéis olvidar antes de dar el salto a una nueva versión de Android para que podáis sacar el máximo partido posible a vuestros dispositivos una vez hayáis obtenido lo más reciente de este sistema operativo.

1. Copia de seguridad, imprescindible

Este es el primer paso que debemos realizar antes de cambiar de versión del sistema operativo, ya sea con mucha antelación o unos instantes antes. Con la creación de una copia de seguridad, nos aseguramos de que todos los contenidos albergados en las galerías como archivos audiovisuales o también, canciones, se conservan. Lo más recomendado en estos casos es copiar en primer lugar la carpeta llamada DCIM.

2. Batería cargada

Aquí ocurre algo muy sencillo: Si nuestra tablet o smartphone se queda sin batería en plena actualización, esta se interrumpe. A primera vista, esto puede parecer un obstáculo sin más y algo totalmente lógico que se soluciona volviendo a conectar el dispositivo a la corriente. Sin embargo, esto esconde algo más y es que si el soporte se apaga por un lado podemos enfrentarnos a que nuestro terminal no funcione correctamente ni en la versión anterior ni en la que instalemos y por otra parte, las aplicaciones pueden generar fallos importantes en materia de compatibilidad o simplemente, no se ejecuten.

3. Borra la caché

Aunque no es algo que pueda repercutir en gran medida en el posterior funcionamiento del dispositivo, una vez hayamos obtenido la nueva versión del software, es recomendable borrar toda la memoria caché. Con ello, la actualización recibe una mayor cantidad de recursos, se reduce el riesgo de errores y finalmente, también disminuye el hecho de que pueda haber archivos erróneos o elementos que repercutan en el manejo normal del mismo y que en muchos casos, puede reflejarse en un consumo rápido de batería o en una lentitud excesiva que imposibilita ejecutar varios procesos de manera simultánea.

4. Restaurar los ajustes de fábrica

Otro paso que no es obligatorio pero sí recomendable a la hora de utilizar las nuevas versiones de software. Apagando el terminal tras realizar esta tarea, sucede algo similar que borrando la caché, es decir, se eliminan procesos y archivos residuales que pueden comprometer el funcionamiento normal del mismo en el futuro. Quizás parezca contradictorio pero, como hemos mencionado en otras ocasiones, lo más lógico es no recurrir a esta función a no ser que sea extremadamente necesario.

5. Asegurar aplicaciones importantes

Si tenemos alguna cuenta de Google, debemos aprovecharla para sincronizar en ella todos los datos relativos a nuestra dirección de correo electrónico, listas de contactos y agenda, eventos y otras herramientas como el calendario que pueden resultar muy útiles. Por otro lado, en el terreno de las apps, también es muy aconsejable que se exporten a otros soportes elementos como conversaciones importantes o la presencia en grupos de Whatsapp así como un registro de las llamadas y de las entradas más relevantes.

Como habéis visto, actualizar nuestros dispositivos puede resultar sencillo a simple vista. Sin embargo, es preferible dejar atados unos cuantos cabos antes de hacerlo ya que si no tomamos medidas como las que hemos descrito, el uso de nuestras tablets y smartphones puede limitarse en gran medida y acabar siendo una experiencia desagradable. Tras conocer más sobre los pasos que debemos seguir antes de instalar una nueva versión de software, ¿Sois partidarios de no hacer esto hasta que acaba siendo imprescindible, o sin embargo, obtenéis las actualizaciones en cuanto estas se encuentran disponibles? ¿Pensáis que estas acciones no tienen ninguna repercusión posterior en el funcionamiento de los soportes, o creéis que es algo obligado que todos debemos hacer para poder sacar el máximo partido posible a los mismos? Tenéis más información relacionada como por ejemplo, las diferentes fases que atraviesa Android desde que se idea hasta que llega a todos los públicos para que podáis conocer todo sobre el software más utilizado del mundo y qué nos encontramos en él desde que nace para que podáis opinar vosotros mismos.