A la hora de hablar de la evolución del sector de la electrónica de consumo en China, a grandes rasgos, podemos ver que el gigante asiático ha conseguido situarse a la cabeza en innovación y que ha recortado posiciones muy rápidamente con firmas de alcance mundial que son capaces de competir contra otros gigantes ya consolidados desde hace décadas. Sin embargo, nos encontramos con un terreno en el que existen dos velocidades distintas. Por un lado, compañías grandes como Huawei han conseguido una gran implantación tanto dentro como fuera de sus fronteras gracias a una estrategia basada en la diversificación y la creación de terminales de diferentes plataformas.
Por otra parte, estamos frente a firmas mucho más discretas que aunque tienen una presencia importante en el país de la Gran Muralla, parten con cierta desventaja al arrastrar ciertos tópicos presentes en los productos tecnológicos chinos como por ejemplo, unos acabados de mala calidad, o unos componentes internos que no son capaces de ofrecer un funcionamiento rápido y eficaz. Hace unos días os hablábamos de las tácticas que marcas como UMI o Doogee estaban utilizando para desmarcarse de estos estereotipos, ahora es el turno de Cubot, que ha lanzado su nueva phablet llamada Cheetah, con el objetivo de asentarse con fuerza en el mercado europeo a través de una serie de características que a continuación os contamos con más detalle.
Diseño
Comenzamos con el aspecto visual. El plástico vuelve a ser el protagonista en este dispositivo que solo recurre al aluminio en los marcos exteriores y en los bordes de la cámara trasera. En el resto de la cubierta nos encontramos con unos acabados que pretenden mejorar la ergonomía del terminal a la hora de agarrarlo y al mismo tiempo, crear la sensación de que nos encontramos frente a un terminal metálico y más robusto con un grosor que no llega a los 8 mm.
Pantalla
En lo relacionado con las prestaciones de imagen, la phablet de Cubot es equilibrada. Con un panel de 5,5 pulgadas y una resolución de 1920×1080 píxeles, ofrece una nitidez correcta tanto a la hora de ver contenidos de todo tipo como de utilizar otras herramientas. Sin embargo, su pantalla IPS puede traer consigo algunos problemas relacionados con el brillo y la ausencia de colores puros que puede dar como resultado una visualización con reflejos en entornos con cambios de luz importantes. En el terreno de las cámaras, estamos frente a dos sensores que también pueden verse afectados por las condiciones del exterior y que alcanzan los 13 Mpx en el caso del sensor trasero y 8 en el frontal. Como dato curioso, podemos añadir que poseen un «Modo belleza» que a grandes rasgos, elimina todas las imperfecciones que tengamos en la cara a la hora de aparecer en alguna foto.
Procesador y memoria
Los fabricantes más discretos que lanzan al mercado dispositivos low cost, también se afanan en crear terminales lo más rápidos posible. En el caso de la phablet de Cubot estamos frente a un chip creado por Mediatek, en concreto el 6753 que también vimos en lo último de Doogee y que, con sus 8 núcleos es capaz de alcanzar los 1,3 Ghz que sin embargo, puede sobrecalentarse en momentos puntuales. En cuanto a la memoria, nos encontramos con una RAM de 3 GB que también es idéntica a la de otros terminales que os comentamos en los últimos días y con una capacidad de almacenamiento inicial de 32 que puede ampliarse mediante tarjetas Micro SD.
Sistema operativo
Al igual que ya sucedió con otros dispositivos como el UMI Touch, el incorporar un software muy reciente puede ser clave para el éxito pero con algunos matices importantes basados en la fiabilidad de la interfaz. Cubot ha decidido añadir Android Marshmallow en Cheetah, con un Launcher creado por la propia marca, que permite agrupar las apps, pero que no incorpora novedades como Material Design y que, en materia de seguridad, tiene fallos importantes como por ejemplo, una vulnerabilidad que da acceso al malware Stagefight al dispositivo.
Autonomía
A diferencia de otras firmas que incorporan baterías de gran tamaño con el objetivo de hacer de la duración de las cargas una baza con la que poder competir contra otros rivales más fuertes, el dispositivo de Cubot se sitúa en la media con un componente cuya capacidad se sitúa en torno a los 3.000 mAh. Pese a que la autonomía no sea la mayor del mercado, la incorporación de Doze en la interfaz es un punto a favor. Al mismo tiempo, está equipado con un lector de huellas dactilares.
Disponibilidad y precio
Al igual que sucede con otras phablets procedentes de los mercados asiáticos y de fabricantes que aún no han conseguido dar el salto a las grandes cadenas de venta de electrónica de consumo, la Cubot Cheetah está disponible a través de portales de compra por Internet a un precio aproximado de 180 euros en tres colores: Dorado, rosa y gris.
Una vez más, las compañías chinas aspiran, independientemente de su tamaño y presencia en otros mercados, a conseguir el liderazgo tecnológico. Tras conocer la última phablet presentada por Cubot, ¿Pensáis que está compañía está preparada para competir con fuerza tanto dentro como fuera de su país o sin embargo, pensáis que las firmas de menor tamaño, aún arrastran muchas limitaciones del pasado manufacturero del gigante asiático del que aún les llevará tiempo desprenderse? Tenéis disponible más información relacionada como por ejemplo, los rivales a los que deberá hacer frente en 2016 para que podáis opinar vosotros mismos.