En el terreno de los sistemas operativos, actualmente encontramos una fragmentación interesante que puede dar lugar a la presencia de más actores en el medio plazo y que sin embargo, ya lleva un tiempo manifestándose. Al referirnos a las interfaces que corren en tablets y smartphones y que las hacen funcionar a diario, podemos encontrar dos grandes familias: Por un lado, la tríada formada por Windows, iOS, y finalmente, Android, que se encuentran de serie en la mayoría de los terminales y que en el caso del software del robot verde, alcanza una cuota aproximada del 80%. Por otro lado, una serie de elementos inspirados especialmente en este último, y que han sido desarrollados por compañías asiáticas que pretenden controlar todos los aspectos de producción de sus terminales y ofrecer una experiencia más personalizada.
Sin embargo, en ocasiones estas herramientas, que a grandes rasgos son capas de personalización y se definen por ofrecer una mayor variedad de temas y elementos visuales para el público, también son proclives a sufrir los avatares que caracterizan al sector de la electrónica de consumo y que dan como resultado la aceptación o una mala acogida del software. La retirada de Cyanogen podría ser uno de los casos más recientes y ya tendría la otra cara de la moneda en Lineage, que ya ha sido considerado su sucesor y que estaría implantándose poco a poco en algunas compañías. Os contamos más sobre él e intentaremos ver cuáles son sus fortalezas pero también sus debilidades.
¿Qué fue de Cyanogen?
Tras unos últimos meses caracterizados por una situación económica delicada, los creadores de Cyanogen se vieron obligados a detener el desarrollo de nuevas ROM´s y versiones de esta plataforma. La decisión, anunciada a finales de diciembre, se hizo efectiva el día 1 de enero aproximadamente. Esto dejaba en un apuro a los usuarios de este software, ya que entre las medidas tomadas, se frenaban posibles actualizaciones. En este artículo os contamos más sobre la situación de la interfaz a finales de 2016.
Llega Lineage
Como era lógico, la cancelación del proyecto Cyanogen disgustó a públicos y a desarrolladores. Un grupo de estos últimos se lanzó a continuar la iniciativa. En primer lugar, un cambio de nombre que dió como resultado Lineage, acto seguido, una serie de modificaciones que pretendían mejorar a la primera y al mismo tiempo, mantener su esencia. Actualmente, puede conocerse más sobre él a través de una página web oficial en la que aparecen noticias e información de actualidad útil para aquellos que quieran saber más y descargarla. En teoría es abierto, lo que facilitaría el acceso de quién lo deseara, a elementos como los códigos fuente.
¿Un paso adelante?
Las imágenes existentes no muestran demasiados avances respecto a su antecesor. Una interfaz igual a la de Cyanogen y recordemos, inspirada en Android, que contiene las mismas funciones tales como la optimización de las aplicaciones, un asistente para garantizar la privacidad del público y un catálogo de temas con los que poder cambiar los fondos de escritorio o los salvapantallas. En algunos terminales, aparece el icono de Cyanogen. Sin embargo, a la hora de encender los dispositivos que cuentan con Lineage, aparece una animación con su logo.
¿Dónde podemos verlo ya?
Todo apunta a que esta plataforma tomará muchos elementos de Android Nougat. Esto puede ser un punto a favor para una mayor implantación y de momento, podría estar disponible para los últimos modelos de la serie Nexus y especialmente, otros procedentes de compañías chinas y entre los que encontraríamos los más recientes y elevados de OnePlus o Motorola. ¿Creéis que acabará consolidándose y ser una de las capas de personalización más populares? ¿Podría dar el salto a otros formatos de mayor tamaño como las tablets en el futuro?
Los retos
En ocasiones, acceder no solo a Lineage sino a otras interfaces inspiradas en Android, puede ser complicado si no vienen instaladas de serie. Por otro lado, estas plataformas suelen tener algunas características que, a pesar de ser consideradas útiles por su creadores, en realidad pueden ser contraproducentes para los usuarios al producir duplicidades en algunas aplicaciones que solo llevan a una mayor carga de trabajo, un descenso del rendimiento y una ocupación de memoria inneecsaria. Por otro lado, no podemos dejar de lado la preferencia de otra gran cantidad de público a tener versiones del robot verde lo más actualizadas posible antes que acceder a estas plataformas que, a pesar de seguir basándose en él, como hemos mencionado tienen otras variaciones.
El futuro
Los softwares de código abierto y con libre acceso siguen siendo muy atractivos para una gran cantidad de usuarios. Lineage intenta aprovechar este tirón. No obstante, es complicado realizar predicciones acerca de cuál podría ser su futuro y más si tenemos en cuenta los altibajos que ha atravesado su antecesor en los últimos años. Tras conocer algo más sobre este software, ¿Pensáis que en el futuro podría acabar siendo una alternativa más accesible y que podremos encontrar en un mayor número de smartphones pero también, de tablets? ¿Creéis que tendrá dificultades para asentarse en un contexto en el que como mencionamos antes, tres grandes sistemas ostentan toda la cuota de mercado a pesar de que haya multitud de capas inspiradas en ellos? Tenéis disponible más información relacionada como por ejemplo, una lista de otros sistemas secundarios para que podáis opinar vosotros mismos.