A mediados de mes os contábamos más sobre la estrategia de Sony para seguir fabricando móviles durante este año que acaba de arrancar. Este cambio de rumbo tenía un único fin: Prolongar, en teoría, la vida útil de sus terminales. El mercado de los smartphones sigue acogiendo a decenas de nuevos modelos procedentes de multitud de compañías tanto asentadas, como más inexpertas. Sin embargo, algunas voces ya están hablando de cierta saturación que puede obligar a tomar decisiones contundentes.
Siguiendo esta línea, la marca nipona ha decidido dar un nuevo golpe de efecto y tomar medidas ya no solo en lo que se refiere a la producción de nuevos modelos, sino al mantenimiento de los ya existentes. A continuación os contamos más sobre la última decisión adoptada por la firma y veremos cuáles pueden ser sus repercusiones más significativas.
Se mantienen las actualizaciones
Tal y como recogen desde PhoneArena, Sony ha decidido seguir dando soporte para Android a sus terminales desde el momento de su lanzamiento, hasta dos años después. Esta medida puede acabar con la incertidumbre que recae sobre los usuarios acerca de hasta cuándo recibirán parches para instalar mejoras importantes que pueden condicionar la vida útil de los dispositivos. Unas de las más importantes, están vinculadas a la seguridad, ya que en muchos casos, las incluyen protección frente a nuevo malware que no existía cuando un modelo o plataforma vió la luz.
La apuesta de Sony por sus buques insignia
Sin embargo, esto no llegará a todos los móviles de la tecnológica. Solo las phablets de gama alta y algunas de la media serán las que continuarán recibiéndolo. En esta última categoría, hay un condicionante más: Solo se seguirá dando soporte si éste garantiza una mayor estabilidad de los dispositivos. Todo apunta a que la compañía ha cogido el testigo a otras como Google, que puso fin a sus actualizaciones a Nougat en los Nexus hace un año.
¿Una acción acertada?
Uno de los problemas que arrastran las mayores compañías, es la fragmentación. Actualmente, es posible encontrar multitud de firmas que tienen en el mercado un gran número de dispositivos que al final, incluso acaban compitiendo entre ellos. Sony parece estar dispuesta a acabar con este fenómeno reduciendo el número de modelos que tiene a la venta a día de hoy y al mismo tiempo, lanzando menos terminales cada año. Si a esto sumamos esta extensión de soporte para Android, ¿creéis que se tratará de un conjunto de estrategias acertado que le permitirá adaptarse al rumbo del sector o su impacto será mínimo? Os dejamos disponible información relacionada como por ejemplo, la incorporación de pantallas flexibles a sus próximas phablets para que podáis conocer más.