La firma Asus parece plenamente inmersa en un proceso de reinvención, tras empezar a volcarse con la línea Zen, la cual engloba una serie de productos Android que tienen en común una interfaz gráfica desarrollada por la propia compañía taiwanesa. Aunque en dicha línea encontramos equipos de todo tipo de rangos, dentro del segmento de las tabletas destaca la ZenPad S 8.0 como la joya de la corona del fabricante y uno de los dispositivos más potentes del mercado actual.
Al contrario de lo que venía siendo habitual en las Transformer Infinity, esta vez Asus ha puesto toda la carne en el asado con una tablet compacta, apostando, para marcar la diferencia con los competidores, por dos elementos significativos: Un procesador Intel y 4 GB de memoria RAM. Además este modelo busca ofrecer ingentes cantidades de espacio de maniobra al usuario, con 64GB de almacenamiento, una ranura para tarjetas micro SD y 100GB gratis por dos años en Google Drive.
Puntos en contra: sobran dedos de una mano para enumerarlos
A pesar de que estamos ante un equipo diseñado y ejecutado con mucho trabajo y cariño, sí podemos resaltar algún que otro aspecto mejorable. Lo que más nos llama la atención en este sentido son las numerosas aplicaciones preinstaladas en el dispositivo. Muchas de ellas se pueden descargar de la Play Store, con lo cual, no vemos necesidad de que se nos impongan.
Entendemos que Asus llega a acuerdos con los desarrolladores para incluir este bloatware en su ZenPad, y, como usuarios, lo interesante al respecto es que ocupan un espacio anecdótico si tenemos en cuenta los 64GB del modelo.
Otra cuestión sobre la que hacer mención aquí es la calidad de su cámara. Capta muy bien la luz en interiores pero sufre y quema la imagen en condiciones de luminosidad excesiva. El modo HDR no es capaz de solucionar este problema. Eso sí, contamos con una amplio abanico de modalidades de captura, lo que potencia este recurso en el dispositivo.
A favor: destaca en casi todos sus apartados
Mucho equilibrio a un nivel muy alto. Si tenemos resaltar algo, sin embargo, nos decantamos por el rendimiento. No hemos sufrido ni un solo lag. El procesador y los 4GB de RAM hacen que la respuesta del sistema sea extraordinariamente veloz, fluida y satisfactoria.
Además, nos gusta el hecho de que la ZenPad S 8.0 sea un equipo de líneas originales y que la capa de Asus permita tantas opciones de personalización al usuario. Eso hace que el dispositivo adquiera singularidad en relación a buena parte de la competencia.
Todo lo que falta por enumerar iría igualmente en esta parte: pantalla, sonido, almacenamiento, batería, etc. se comportan de manera excelente.