Acer Iconia W700 es una tableta Windows 8 de proporciones estándar para lo que vemos en este sistema operativo. La compañía taiwanesa ya tiene bastante experiencia en la fabricación de tabletas, y aunque sus modelos más destacables han estado siempre en Android, también ha trabajado con sistemas operativos de Microsoft para dispositivos táctiles. El otro modelo que le conocemos, el W510, es más una tableta híbrida con teclado – dock opcional que nos da una experiencia más de tableta al ser más reducida y ligera. En este caso, y así pasa también en las tabletas Windows 8 de alta gama, tenemos una pantalla de 11,6 pulgadas y, al contar con procesadores Intel Core, se convierten en dispositivos más cercanos a los ultrabooks que a las tabletas. En competidoras suyas como Samsung ATIV Smart PC Pro, se siguió optando por un modelo híbrido con teclado estación, pero Acer ha tomado otra vía y nos presenta una tableta suelta, más tradicional pero que, para sacarla el máximo, necesita de muchos complementos.
Diseño
Iconia W700 es una tableta bien hecha, muy compacta. Su carcasa de aluminio tiene un gran acabado con un parte de trasera cepillada que ayuda a que no se resbale cuando la sostenemos. Es un aparato bastante pesado, por encima del kilo, por lo que debemos sujetarla con fuerza. Este excesivo peso nos impide transportarla con comodidad. Da la sensación de que debemos sentarnos para utilizarla y que, ni aunque tuviera 3G, la sacaríamos fuera de casa más de lo que sacaríamos un ultrabook. Es bien grande, con dimensiones de 295 x 190 x 12,7 mm. Es decir, realmente gruesa con 1,27 cm de grosor pero, claro, lleva una bestia de procesador dentro y una gran batería. Los materiales son claramente nobles y los botones funcionan bien y dan la sensación de ser muy durables.
Los altavoces están bien colocados en la parte de abajo de la tableta dado que raramente los taparemos con la mano al sostener la tableta en posición de paisaje.
Habitualmente os hablaría de los accesorios de la tableta al final, pero en este caso es esencial para la experiencia de la misma por su planteamiento. La caja en la que se embala esta tableta nos avisa de la cantidad de accesorios que se nos vienen encima.
En primer lugar, tenemos un soporte que se conecta a la entrada de energía y al USB de la tableta y por el lado izquierdo. El USB se transforma en 3 y la entrada para el cargador simplemente se puentea. Unos huecos en la parte inferior permiten que el sonido salga nítidamente.
Lo raro y positivo de este soporte es que vale tanto para posición horizontal como vertical. Para sujetarlo tenemos como una rara cuña que se debe insertar de dos maneras dependiendo de qué posición estemos buscando. Tenemos una pegatina con instrucciones visuales que son un claro augurio de la dificultad de ensamblar bien esa cuña en la estación. El ensamblaje es poco intuitivo, aunque una vez lo aprendemos se hace con velocidad.
En esta posición podemos acceder a la tableta sin necesidad de sujetarla y al poder acceder al modo clásico de Windows se nos incita a utilizar el segundo accesorio: el teclado Bluetooth. Éste viene convenientemente ataviado con un botón de on y off que resulta muy útil para que no haya confusiones. Las teclas blancas de chicle se insertan en una superficie plástica con pintura metalizada. Tiene una cierta elevación en la parte de atrás para hacer más cómodo teclear. Echamos de menos un pad, sinceramente. Dado que si queremos tener una experiencia del modo escritorio satisfactoria, el utilizar el dedo como ratón nos dará dolores de cabeza.
Por último, tenemos una funda de cuero realmente bonita que sirve a su vez de soporte en dos grados de inclinación al plegarse. Por dentro, lleva un material suave que protege perfectamente la pantalla. Sin duda, es el mejor de los tres accesorios.
Pantalla
Tenemos una pantalla Full HD de 11,6 pulgadas con una resolución de 1920 x 1080 píxeles que resultan en una densidad de pixeles de 191 ppi. Estamos ante un panel LCD IPS que, además de darnos un gran ángulo de visión, nos aporta una luminosidad muy interesante. Éste se ve también en los portátiles de la compañía que brillan con intensidad y que tienen una nitidez remarcable.
Por otro lado, la respuesta a los gestos táctiles es realmente buena, aunque quizás en eso tenga mucho que decir el buen procesador y el sistema operativo.
Rendimiento y autonomía
Esta tableta se puede conseguir en dos modelos con distintos procesadores. O bien un Intel Intel Core i3 2365M con tarjeta gráfica HD 3000 o un Intel Core i5 3317U con tarjeta gráfica HD 4000. Ambos vienen con 4 GB de RAM acompañados pero uno va con 64 GB de ROM y otro con 128 GB, respectivamente. El modelo que nosotros hemos probado es el menos potente. Aún así, podemos decir que la máquina responde muy bien a todos los procesos que inicia, tanto lanzar aplicaciones, como navegar o jugar a juegos. Aunque sinceramente, tampoco se puede decir que supere a una tableta Android o un iPad con un procesador mucho menos potente. Lo que sí que es destacable es la velocidad con la que se enciende, nada que ver con los PC Windows de escritorio o portátiles.
En benchmarks el modelo con Intel Core-i5 ha conseguido geniales notas, por encima de otros modelos con exactamente el mismo procesador. Lo que quiere decir que Acer está haciendo las cosas bien. El modelo Intel Core-i3 está por encima de otras tabletas Windows 8 que utilizan procesadores Atom.
Por otro lado, la batería de 4850 mAh se aprovecha al máximo dando una autonomía excelente, por encima de las 10 horas que ya es marca de la casa.
Memoria
El modelo con sólo 64 GB puede que se te quede corto, dado que el sistema operativo ocupa 26 GB y no tenemos tarjeta SD. El modelo de 128 GB es más que suficiente.
Conectividad
Hablamos de un equipo con gran conectividad dentro de casa o de la oficina. Tanto el USB 3.0, el Bluetooth y el microHDMI la hacen una tableta genial para coordinar con otros aparatos o para exportar la imagen a una pantalla más grande.
Sistema operativo
Tenemos Windows 8 con sus virtudes y sus inconvenientes. La versión de escritorio cuenta con Office si lo compramos, aunque en esta tableta necesitaremos comprarnos un ratón para poder sacarle el máximo. La versión mosaico está bien, va rápido y es intuitiva. Aunque hay ciertas acciones normales como volver, cambiar de aplicación abierta o seleccionar que no se desempeñan de manera sencilla. Además, algunas aplicaciones propias como las de correo son limitadas y la capacidad de compartir materiales como fotos, documentos y vídeos desde ellas hacia otras aplicaciones o servicios de cloud o correo es un poco limitada.
Cámaras
Las cámaras no están mal, la delantera cumple su función para videollamada con Skype con normalidad. La trasera de 5 MPX funciona bien y hace fotos nítidas y con buena intensidad de color. Sin emargo, en condiciones lumínicas complejas no responde bien. En el vídeo lo notamos aún más.
Precios y conclusiones
Estamos ante una tableta enfocada a profesionales sin ninguna duda. Sus precios van de 559 euros, en el modelo más básico con sólo un accesorio, hasta el modelo más caro hasta 959 con el modelo más completo, con Windows 8 Pro y todos los accesorios. Hay hasta 6 planteamientos distintos para elegir. Por lo que vemos, sus precios no son los más baratos y quizás para casas y personas que van a disfrutar de contenidos hay opciones más razonables y baratas.
Por otro lado, aunque el equipo sea realmente potente, su diseño es un tanto confuso y su limitada capacidad de portabilidad hará que la dejemos en casa o que la utilicemos con un ultrabook táctil más.