Qué duda cabe, Chrome es uno de los navegadores más eficientes y veloces de cuantos podamos encontrar no sólo en el sistema Android, sino también en muchas otras plataformas, móviles o de escritorio. Aún así, existe una forma de volver esta herramienta aún más ligera y puede llevarse a cabo sin ningún tipo de complicación, sólo completando un par de pasos que os detallamos a lo largo del artículo.
La mayor parte de usuarios de dispositivos de la gama alta de unos años a esta parte, no tendrán ninguna queja acerca del funcionamiento de Chrome. Todo lo contrario, lo normal (en caso de gozar de una buena conexión a internet) es encontrarse razonablemente satisfecho con los resultados de este conocido navegador. Sin embargo, los equipos algo más antiguos, con 1GB de memoria RAM o menos, pueden no estar tan convencidos de las bondades de Chrome. Si ese es tu caso, te recomendamos hacer lo siguiente para disfrutar de una mayor velocidad de navegación:
Cómo mejorar la respuesta de Chrome
Lanza la aplicación y cuando la tengas abierta escribe en la barra de direcciones esta URL: ‘chrome://flags/#max-tiles-for-interest-area‘ (sin las comillas), después pulsa Enter.
A continuación nos saldrá una pantalla como ésta de abajo, con una parte de la primera de la líneas subrayadas en amarillo: Máximo número de mosaicos el área de interés.
Vamos al desplegable de la sección subrayada y tocamos donde pone predeterminado. Surgirán 4 opciones manuales: 64, 128, 256 y 512.
Os recomendamos probar primero con 256 y si sigue sin convencernos pasar a 512.
Una vez lo tengamos seleccionado, pulsamos el botón de reinicio en la zona inferior de la pantalla, entonces Chrome se cerrará y volverá a abrirse solo. A nivel estético no notaremos diferencia alguna, simplemente apreciaremos que las páginas y las imágenes cargan mucho más rápido de lo habitual.
Otros aspectos a tener en cuenta
Realizando la operación anterior, como os decimos, conseguiremos darle una revolución extra a Chrome sin notar ningún tipo de carencia a cambio. No obstante, hay otros muchos motivos por los cuales el navegador puede ir lento: una mala conexión o los servidores deficientes de la web que queremos cargar son habituales.
También es posible que nuestra tablet esté al límite de sus fuerzas porque tengamos muchas aplicaciones funcionando en segundo plano o simplemente porque la memoria esté saturada de información. De ser este el caso, hace unas semanas os contamos una serie de trucos para aligerar su funcionamiento que podéis poner en práctica.