La semana pasada hacíamos repaso de la situación de la batalla entre Apple y Samsung, al rojo vivo ahora mismo tanto en el terreno de los phablets como de las tablets. Como siempre en estos casos, no obstante, es siempre tentador pensar en el futuro y eso nos lleva a la siguiente polémica: ¿debería ser la Galaxy Tab S4 o la Galaxy Book 2 la auténtica rival del futuro iPad Pro 2?
El panorama en Android frente al persistente dominio del iPad
Los últimos datos sobre las tablets más vendidas no dejaban lugar a dudas: si algún fabricante está en condiciones de dar caza a Apple, incluso a pesar del avance de las tablets Huawei, sigue siendo Samsung, algo a lo que contribuye el simple hecho de que, al margen de Google, es el único fabricante que sigue haciendo apuestas interesantes en el terreno de las tablets Android de gama alta.
Seguramente las tablets Huawei seguirán ganando terreno en los próximos tiempos, pero lo más probable es que lo hagan más a costa de otros fabricantes cuyo reclamo es también la relación calidad/precio, y de hecho eso es lo que sugerían esas estadísticas, donde el único que había perdido algo de cuota de mercado era Lenovo. La realidad es, en todo caso, que sin dispositivos de gama alta, está complicado que Huawei pueda llegar a ejercer el tipo de liderazgo que ha ostentando Samsung todo este tiempo.
El giro de la gama alta y el lento pero constante crecimiento de Windows
La cuestión, por otro lado, es que no está del todo claro que una tablet Android sea realmente la apuesta correcta para competir con el iPad, y más concretamente con el iPad Pro, sobre todo a la vista de que, bajo la influencia de los 2 en 1 Windows, no sólo está subiendo mucho de nivel en hardware, sino que también está orientándose cada vez a sustituir a los portátiles.
Samsung, además, está afianzando su posición cada vez más en el terreno de las tablets Windows, y su Galaxy Book 12 es ya una alternativa muy potente a la Surface Pro y al iPad Pro de 12.9 pulgadas. De hecho, en el MWC se llegó a presentar un modelo de 10 pulgadas que habría podido ser una gran rival para el iPad Pro de cara a quienes buscan una tablet de corte más productivo pero que, desafortunadamente, no se llegó a lanzar directamente en nuestro país (se puede encontrar de importación, pero el precio lógicamente sube mucho).
¿Hay una tercera vía?
En estos días previos al evento de Google, no obstante, tenemos que preguntarnos también si no hay una tercera vía para Samsung (y otros) a la hora de competir con los iPad Pro: ya os hemos contado que algunas fuentes apuntan a que junto a los nuevos Pixel se va a subir al escenario un nuevo Chromebook y este podría ser un poco distinto de los anteriores, con un diseño que le definiría plenamente como convertible y con un hardware del máximo nivel.
Habrá que esperar para ver si esto se confirma (quizá lo haga, pero no en este evento, sino más adelante), pero en caso de que así sea, esta podría ser otra opción de cara a lanzar una tablet que pueda hacerse un hueco en esta nueva gama alta de tablets cada vez más caras, pero también cada vez más potentes, manteniendo aún el reclamo de la conexión con Android para los fans de este sistema operativo. Algunos de los Chromebook más interesantes, de hecho, llevan ya su sello.
Hagan sus apuestas
El lanzamiento de la Galaxy Tab S3 está aún bastante reciente y los ciclos de renovación de las tablets (con la excepción quizá del iPad) son algo maś largos que los de los smartphones, por lo que a estas alturas aún no hay filtraciones, registros ni rumores que nos permitan hacernos una idea de en qué está trabajando Samsung. Es seguro (o casi) que, eso sí, habrá una Galaxy Tab S4 y una Galaxy Book 2, y se pueden hacer algunas estimaciones de lo que podemos esperar ver en ellas en función de lo que los rivales han puesto sobre la mesa últimamente, pero no mucho más.
La idea de que Samsung se lanzara a seguir los pasos del supuesto PixelBook es una especulación mucho más atrevida, empezando porque ni siquiera sabemos que hay de cierto en los rumores sobre este convertible. Hay que decir, en cualquier caso, que si algo nos ha dejado claro la historia del fabricante coreano es que no temen las decisiones arriesgadas y si de alguno cabe esperar que se lance a explorar un nuevo formato o camino, es de él.
Lo que sí parece cada vez más claro, viendo la evolución del mercado, es que si pretende dar caza al iPad quizá haya que empezar a plantearse cambios en el plano del sistema operativo. Eso no quiere decir que esperamos que abandone, ni mucho menos, el terreno de las tablets Android, especialmente las de gama alta, cuyo futuro ahora mismo está casi exclusivamente en sus manos, pero quizá haya otros modelos a los que conviniera dar más protagonismo. ¿Qué opináis vosotros?