Cuando vamos a comprar una tablet nos fijamos en varios aspectos fundamentales. Los más llamativos suelen ser la calidad de la pantalla, el procesador, el diseño y, cómo no, el fabricante. Sin embargo, hay un aspecto que no suele tratarse demasiado en medios especializados pero que sí que importa a los usuarios que es la memoria interna. Hoy vamos a reflexionar sobre el precio del almacenamiento interno en las principales tablets del mercado.
Con o sin micro SD
En la estrategia comercial sobre el almacenamiento, podemos advertir dos opciones.
Primeramente están las marcas que tienen intereses en la venta de contenidos digitales y espacio de almacenamiento en nube. Éstas son, además, los fabricantes de las tablets más famosos: Apple con sus iPad, Google con sus Nexus 7 y Amazon con sus Kindle Fire. Habitualmente optan por no dar opciones de almacenamiento externo, es decir, no incluyen ranura para tarjeta SD y su USB no es OTG, es decir, no lee discos duros externos o pen drive.
Microsoft es un rara avis, dado que tiene todos estos intereses pero sí que proporciona ranura para almacenamiento externo.
Por otro lado, están los fabricantes normales que llevan a la cabeza a Samsung y Sony. Estos suelen optar por fomentar el almacenamiento externo.
Los aumentos del almacenamiento interno salen caros
En lo que se refiere plenamente al almacenamiento interno, muchos modelos de tablets ofrecen varias opciones y aquí es donde viene la trampa. Es precisamente el primer grupo que antes describíamos el que más caro cobra las opciones mayores de almacenamiento, aunque algunos del segundo grupo también siguen esa línea. Microsoft también las acompaña en esta política, a pesar de que todos sus equipos tienen ranuras SD y USB OTG.
Si miramos la diferencia de precio entre los distintos modelos del Nexus 7, veremos que entre el modelo de 16 GB y 32 GB hay una diferencia de 40 euros. En el caso del Nexus 10, la diferencia es de 100 euros. Sí, 100 euros por 16 GB.
Comprobando la diferencia de precio entre cada salto hacia un almacenamiento mayor (16 GB, 32 GB, 64 GB, 128 GB) en los dos últimos iPad, veremos que se trata de 90 euros.
En el caso de Amazon, vemos que en el Kindle Fire HDX 7 el salto de 16 GB a 32 GB y a 64 GB se hace añadiendo 40 euros cada vez. En el caso del Kindle Fire HDX 8.9 este mismo salto se da con 50 euros.
Las Surface de Microsoft suben 100 euros cada ampliación de memoria, eso si el salto mínimo es de 32 GB.
Si miramos el precio de lo que valen 16 GB de memoria Flash, éste no supera los 9 euros y seguro que a un fabricante le puede salir mucho más barato.
Las conclusiones son agrias a todas luces. El precio que la mayoría de los fabricantes cobran por el almacenamiento interno en sus dispositivos es desproporcionado.
Arbitrariedad en el precio de la memoria
Además, se aprecia una arbitrariedad total en el precio. Google es capaz de cobrarnos por 16 GB adicionales más del doble en un Nexus 10 que en un Nexus 7. Amazon, cobra 10 euros más por este mismo espacio si elegimos el modelo de 8,9 pulgadas.
En Apple y Amazon, vemos que con una misma cantidad de dinero, podemos comprar, dependiendo de la ampliación que queramos, 16 GB, 32 GB o 64 GB. Es decir, ¿cómo es posible que el modelo de 128 GB del iPad Air valga sólo 90 euros más que el de 64 GB cuando el de 32 GB vale también 90 euros más que el de 16 GB?
Parece comprensible que pueda haber un coste adicional por la dificultad de montar más espacio en un mismo tamaño de dispositivo, pero no hasta estos límites.
Solución: tablets con ranura micro SD
La cuestión es que si queremos tener más espacio para guardar nuestros archivos y contenidos con estas tres compañías, tendremos que pagar una cantidad un tanto desproporcionada. Lamentablemente la diferencia con otras marcas tampoco es muy grande, pero al menos sí nos dan otras opciones de ampliación.
En definitiva, si eres de los que te gusta poder gestionar tu espacio, parece más inteligente buscar opciones de tablets con ranura micro SD y pagar un precio normal por la memoria.