Hace una semana aproximadamente saltó la noticia de que Samsung había invertido capital en comprar un parte de Sharp. Las pantallas de la compañía japonesa son de una calidad excelente y parecen destinadas a jugar un papel crucial en el mercado de los móviles y tabletas durante los próximos años. Apple puede ser una de las firmas que primero empiece a beneficiarse de los paneles IGZO, pues ya parece darse por sentado que las próximas generaciones del iPad incorporarán este tipo de tecnología.
No obstante, Samsung jugó una importante baza estratégica haciéndose con participaciones en Sharp, de esta forma, continúa teniendo cierto control sobre los componentes que utilizará Apple para sus productos estrella y además es muy posible que los coreanos se decanten también por montar una pantalla de esta firma en el próximo Galaxy Note 3. El motivo es que su funcionamiento junto al pen característico de la línea Note alcanza una eficiencia mayor de lo que lo hacen paneles AMOLED y el objetivo prioritario de los surcoreanos es perfeccionar la experiencia con el Stylus en su próximo dispositivo.
Por lo demás, sólo hay interrogantes en torno al nuevo phablet de Samsung. Hace algunos meses empezó a cobrar forma la hipótesis de que el equipo tendría una pantalla de 6,3 pulgadas, aunque los rumores de un tamaño algo inferior, 5,9’’, también han estado rondando últimamente. En cuanto al procesador, parecía clara la opción del Exynos 5 Octa, pero los aparentes problemas del chip con la conexión tipo LTE, han sembrado dudas con respecto a esta cuestión y tampoco se descarta que repitan colaboración con Qualcomm.
Fuente: SamMobile.
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