Microsoft anunció hace unas semanas el próximo lanzamiento de su tableta Surface con la que quiere entrar en un mercado que hasta ahora ha sido de Apple y su iPad. Hasta ahora sólo Google había hecho una apuesta real por competir con Apple pero Microsoft incorpora nuevas características a las tablets que parecen venir del pasado y de lo que quizás habíamos perdido con las evoluciones de Apple. Ciertamente Microsoft Surface apuesta por restablecer puentes entre los clásicos usuarios de PC y los nuevos dispositivos.
En este artículo repasaremos algunas de estas antiguas ventajas.
Surface funcionará con el nuevo sistema operativo Windows RT.
Históricamente Windows dejaba a otras compañías desarrollar dispositivos para sus sistemas operativos, pero en este caso toma la delantera. Windows RT no es más que una versión adaptada a tablets de Windows 8, por lo que el mismo sistema operativo funcionará igualmente con ratón que con pantallas táctiles. En los dos casos utilizará una estructura de mosaico que nos recordará un poco a Xbox. De este modo, Microsoft apuesta por la congruencia, por una experiencia unificada y que nos resulte familiar.
Microsoft Office como parte de Surface.
Al ser Windows, Surface seguirá utilizando el clásico popular de Office y otras aplicaciones de Microsoft. Aunque en el campo de las aplicaciones para tablets y móviles, Windows esté a años luz por debajo de Apple y Android, es bien cierto que en las oficinas de miles de empresas siguen utilizando y trabajando diariamente con Microsoft y con Office. Muchas empresas verán con buenos ojos la solución de continuidad que Microsoft está brindando frente a lo que parecía un inevitable gasto en formación para que sus empleados de vieja guardia se sintieran cómodos en los entornos de Apple y Android. A esto le tenemos que sumar la cuestión de los formatos de los documentos. Creemos, por lo tanto, que muchas empresas encontrarán en Surface una solución sencilla para que sus empleados puedan seguir trabajando desde una tableta.
El hardware es importante: teclado y USB.
Las bondades de las pantallas táctiles parecían infinitas pero todos hemos sentido cierto hastío al intentar escribir un correo largo en un iPad o cualquier otra tableta. Cierto es que algunas incorporaban la posibilidad de conectar un teclado que hacía que la tablet ya no fuera tan ligera. Surface ha llegado con una solución a priori brillante: una funda para la tablet que en realidad es un teclado. Este teclado de 3mm sensible a la presión se conecta por un enchufe magnético. Además, puedes elegirlo en varios colores para así personalizar el aspecto de la tablet. Microsoft Surface viene con un puerto USB y una ranura de tarjeta SD. Esto acorta la distancia con los ordenadores de sobre mesa y los portátiles.
Trae un pie plenamente incorporado. En lugar de tener que comprar un pedestal adicional, Surface incorpora directamente un pie desplegable para poder dejarlo de pie. Además con sus dos cámaras, una frontal y otra trasera, permite mantener vídeo-llamadas de una forma sencilla y poder grabar reuniones.
Conciliación de lo nuevo y lo viejo.
Claramente Microsoft quiere utilizar su antigua masa de clientes para entrar en el mercado de las tablets y rehacerse de su bajada en ventas y bolsa. Es evidente que están pensando mucho en el usuario, tal como reconocía en el evento de presentación de Surface el CEO Steve Ballmer: “Creemos que cualquier intersección entre humano y máquina se puede hacer mejor cuando todos los aspectos de la experiencia – software y hardware- entran en consideración y trabajan en la misma dirección”. Sabias palabras.