Conoce más sobre las grandes familias de apps para tu tablet

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Cuando escuchamos la palabra «aplicación», de inmediato nos viene a la mente alguno de los catálogos donde podemos encontrar todos estos miles de títulos. En Google Play por ejemplo, encontramos una categorización entre apps divididas en diferentes clases que van desde las educativas, hasta las de productividad. También existen decenas de miles de juegos que se agrupan por géneros y por edades. Por otro lado, podemos encontrar libros e incluso canales de televisión disponibles para nuestras tablets y smartphones, lo que configura a estos terminales como una herramienta multiplataforma en la que podemos realizar desde el mismo dispositivo, acciones que antes debíamos hacer por separado.

Sin embargo, estas listas se configuran atendiendo simplemente a las características que puede ofrecer cada una de las apps disponibles y no atendiendo a otros criterios como su compatibilidad o las funciones que tienen en nuestros terminales. A continuación os contamos más sobre las 3 grandes familias en las que se dividen todas las aplicaciones, ya sean juegos, instrumentos para mejorar el rendimiento de nuestros aparatos o bien, herramientas de edición de vídeo y os contamos para qué sirven, cuáles son sus ventajas e inconvenientes, y también, qué grupo se ajusta más a nuestras necesidades como usuarios.

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1. Apps nativas

Esta aplicaciones son las que encontramos instaladas de serie en nuestros dispositivos. Se trata de aquellas herramientas que están creadas de manera concreta para el sistema operativo y las que intentan completar o mejorar el rendimiento del software. Con ellas, se puede acceder a la mayor parte de elementos del terminal como la cámara o el GPS y al mismo tiempo, permiten conocer más datos sobre cómo se gestionan los recursos. Entre sus mayores ventajas, encontramos que son unos de los instrumentos que más actualizaciones reciben y el hecho de que al encontrarse configuradas desde el primer momento, no necesitan de conexión a Internet para funcionar. Por otro lado, están disponibles en los catálogos para poder acceder a ellas cuando sea necesario. Sin embargo, cuentan con limitaciones importantes como su incompatibilidad con sistemas operativos que no sean el suyo propio o, en el caso de los desarrolldores, un mayor coste de creación y mantenimiento.

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2. Aplicaciones web

En segundo lugar, hablamos de estas herramientas que tienen como punto fuerte, el hecho de que no necesitan instalarse en los terminales, y por tanto, el consumo de memoria que realizan es mínimo. Podríamos decir que este tipo de aplicaciones son complementos de otras que sí están instaladas de serie como por ejemplo, los navegadores. Su función es la de adaptar a los dispositivos los contenidos que encontramos a la hora de visitar las páginas web para poder acceder a ellos de manera más sencilla y sin errores. Pese a que no se trata de una aplicación en sentido estricto al no necesitar descargarla ni almacenarla como mencionamos antes, sí es posible crear accesos directos de las mismas en los escritorios de nuestros modelos. Se trata de un formato muy extendido especialmente, entre los medios de comunicación, que utilizan las webapps para compatibilizar sus productos con los terminales de menor tamaño. Sus mayores inconvenientes son el hecho de que no puede entrar ni activar el hardware del terminal y un coste de creación más elevado.

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3. Webapps nativas

Por último, hablamos de este elemento que recoge rasgos de los dos anteriores. Entre sus mayores ventajas, encontramos el hecho de que son compatibles con casi todos los sistemas operativos, que están disponibles para su descarga y su utilización en los catálogos de aplicaciones y por último, que permite acceder a elementos internos del dispositivo como las listas de contactos o las cámaras. Su gran obstáculo viene por el aspecto de su manejo, ya que es más complicado que el de las aplicaciones nativas y, en algunos casos, no muestran correctamente los elementos que encontramos en la navegación. Por otro lado, esto también puede producirse al intentar visualizarla en diferentes softwares.

Como habéis visto, además de las categorías en las que nos encontramos todas las aplicaciones que utilizamos en nuestro día a día, existen otras grandes familias en las que podemos agrupar muchas de ellas, atendiendo al modo que tienen de interferir en nuestras tablets y smartphones y al mismo tiempo, en la manera de la que los usuarios manejamos nuestros terminales y disfrutamos de funciones como la reproducción de contenidos audiovisuales, o la lectura de medios. Esta agrupación en tres es solo una de las maneras en las que podemos clasificar las decenas de miles de títulos existentes. Tras conocer más sobre ellas, ¿Pensáis que falta algún miembro más, o que incluso, se podría reducir esta lista? ¿Creéis que todas deberían ofrecernos más funciones y que, en el caso de las apps nativas por ejemplo, los desarrolladores tendrían que trabajar más para mejorar aspectos como la compatibilidad entre sistemas operativos? Tenéis disponible más información similar como por ejemplo, todas las fases por las que pasa Android antes de llegar al gran público para que conozcáis mejor cómo funcionan nuestros terminales.


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