Después de su reciente llega a Android, Mega se dispone a hacer su entrada triunfal en iOS. El servicio de almacenamiento completará casi por completo un salto hacia los dispositivos móviles que también contempla la llegada a Windows Phone. El bueno de Kim Dotcom lleva así su servicio a aquellos terrenos donde ahora mismo se libre la batalla por el liderazgo en el almacenamiento en la nube, en los móviles y tablets, donde iPhone e iPad brillan.
En este sector hay una gran competencia, pero Dropbox sigue sobrevolando sobre los demás al contar con unas aplicaciones precisas en todas las plataformas, un precio razonable en los paquetes extras de espacio y una antigüedad que dificulta las mudanzas a nuevos servicios.
La apuesta del servicio heredero de Megaupload es más potente de forma inicial. Nos aporta 50 GB gratuitos desde el principio por tan sólo 2GB de Dropbox. Sus planes de ampliación son los más baratos del mercado.
En comparación con otros servicios que ofrecen capacidades como la edición de archivos, como Google Drive y SkyDrive, en este servicio la bandera es la seguridad. Gracias a una encriptación que ocurre en el cliente del dispositivo del usuario, sólo éste puede descifrar los datos que ha subido.
En la aplicación de Android se ha incluido una funcionalidad que recorta distancias con Dropbox, la subida directa de las fotos y vídeos hechos con la cámara. Esta opción siempre le ha dado muchos enteros. También se podrán editar los nombres de las carpetas y archivos que allí guardemos, además de moverlos de lugar. Por supuesto, también contará con la capacidad de poder compartir enlaces de descarga, algo esencial para sus usuarios potenciales.
Mega todavía se halla todavía en fase beta, por lo que es previsible que haya novedades, restructuraciones y también fallos en el futuro hasta que sea un servicio estable. En Android se puede cacharrear ya, aunque hay algunas deficiencias en el rendimiento. Pronto veremos cómo se comporta en iOS.