Un nuevo buque insignia se ha sumado hoy a la dura competición entre smartphones y phablets de gama alta lanzados en estos primeros meses de 2014, el nuevo HTC One M8 que, a pesar de haberse presentado casi un mes más tarde que sus principales rivales, llegará a las tiendas prácticamente al mismo tiempo. Os mostramos una comparativa de especificaciones técnicas con el que probablemente sea el más difícil de batir de sus rivales, el Galaxy S5, para que podáis juzgar por vosotros mismos cuál es el más interesante de los dos.
Diseño
El diseño fue uno de los aspectos más alabados del HTC One y los taiwaneses, inteligentemente, lo han conservado prácticamente intacto para su sucesor. Frente al Galaxy S5, cuenta con algunos valores interesantes, como la carcasa metálica o la ubicación de los altavoces para favorecer el sonido estéreo a la hora de utilizarlo como dispositivo multimedia. El smartphone de Samsung, por su parte, tiene a su favor su resistencia al agua.
Dimensiones
A pesar de que la pantalla del Galaxy S5 es un poco mayor (aunque la diferencia, es cierto, es muy pequeña), los dos dispositivos están bastante parejos en lo que a dimensiones se refiere, y probablemente no sea un factor decisivo para la mayoría de usuarios: 14,2 x 7,2 cm frente 14,64 x 7,06 cm. En lo que sí lleva ventaja clara el smartphone de Samsung, sin embargo, es en el grosor: 8,1 mm frente a 9,4 mm.
Pantalla y sonido
Además de la mencionada pequeña diferencia de tamaño (0.1 pulgadas, únicamente), lo único que distingue de manera significativa ambas pantallas es la utilización de paneles Super AMOLED en el Galaxy S5, lo que implica para algunos la desventaja de cierta sobresaturación de los colores (se sabe que aquí hay discrepancia de opiniones). En lo que se refiere a la resolución, sin embargo, ambos dispositivos están igualados con 1920 x 1080 píxeles (pantalla Full HD). Por lo que respecta al sonido, sin embargo, la victoria probablemente sea para el nuevo HTC One gracias a su sistema de audio BoomSound.
Rendimiento y sistema operativo
En este apartado el Galaxy S5 sería algo superior, con una frecuencia de procesador algo más alta (2,5 GHz frente a 2,3 GHz), si bien en ambos casos se trata de un Snapdragon 801 de cuatro núcleos. También están igualados en cuanto a memoria RAM, con 2 GB cada uno. Cuestión diferente, no obstante, es la fluidez del sistema operativo, ya que el TouchWiz de Samsung muestra a veces ciertos problemas de fluidez. El HTC One M8, por su parte, estrenará el HTC One Sense 6.0.
Capacidad de almacenamiento
En lo que respecta a la capacidad de almacenamiento, el empate es absoluto ya que ambos smartphones pueden conseguirse con hasta 64 GB de memoria y, además, la nueva generación del HTC One ha resuelto la deficiencia que arrastraba su predecesor, incluyendo también ranura para tarjetas micro-SD.
Cámara
La cámara es uno de los puntos más fuertes del nuevo HTC One, con su tecnología Ultrapíxel, que es de especial utilidad para sacar fotografías con poca luz, y con su cámara dual, que combina dos sensores de 5MP para sacar fotografías con resolución de 2592 х 1944 píxeles, además de añadir algunos opciones interesantes, como la de re-enfoque o los efectos 3D. Samsung, en cualquier caso, ha mejorado la cámara del Galaxy S5 sensiblemente respecto a su predecesor, con 16 MP y capacidad para grabar en 4K.
Autonomía
Aún no tenemos tests independientes de autonomía para el Galaxy S5 y, lógicamente tampoco para el HTC One M8, pero en lo que respecta a la capacidad de sus baterías la victoria es el para el primero con 2800 mAh frente a los 2600 mAh del segundo. Merece la pena señalar, en cualquier caso, que el smartphone de Samsung cuenta con un modo de ahorro de batería extremo, pero hasta que no haya pruebas de uso resulta difícil valorar su utilidad. Lo mismo sucede con las estimaciones de autonomía que nos da HTC (270 horas en espera y 14 horas en conversación).
Precio
Esperábamos que un punto importante a favor de la nueva generación del HTC One fuera su precio, pero por lo que hemos visto hoy parece que finalmente no será así, ya que se venderá en nuestro país por 729 euros mientras que en el caso del Galaxy S5, y aunque no hay confirmación oficial, lo normal sería que estuviese en 700 euros (por supuesto, estaremos atentos para informaros si hay alguna novedad al respecto)