Aunque presentada oficialmente en el mes de junio, no ha sido hasta la semana pasada que las nuevas Galaxy Tab S, las últimas tabletas de gama alta de Samsung con pantalla Super AMOLED, han llegado a las tiendas, no hemos tardado demasiado en tener acceso a sus primeros test de autonomía, fundamentales para saver cuál es la vida real de su batería, tanto para el modelo de 8.4 pulgadas como para el de 10.5 pulgadas. Estos son los resultados.
Ya conocemos bien las especificaciones técnicas de las nuevas Galaxy Tab S pero, como siempre, hay unos cuantos apartados en los que, sin lugar a dudas, las cifras oficiales necesitan algunos tests independientes, algo especialmente necesario en el caso de la autonomía, prácticamente imposible en realidad de derivar de la capacidad de la batería de las tabletas, ya que el consumo es parte igualmente importante de la ecuación. Afortunadamente, ya podemos despejar esa incógnita, a la hora de comparar el potencial de estas dos tablets con el de sus rivales, algo que quizá muchos estuvieran esperando antes de decidirse a hacerse con ellas y que, en cualquier caso, siempre es una información interesante para futuros compradores.
Resultados positivos, pero irregulares
Como ya sabéis, nuestros test de autonomía preferidos son los que, como el que os traemos hoy, nos permiten medir la eficiencia de los dispositivos para distintos tipos de actividades, ya que eso permite a los usuarios juzgar con más detalle cuál de ellos es el que se adapta mejor a sus necesidades. Tratándose de una tableta, en cualquier caso, el apartado habitual de “llamadas” queda descartado, lógicamente, y toda la atención se centra en la vida de la batería en navegación y reproducción de vídeo.
Ocupándonos primero de los test de navegación (con conexión Wi-Fi), los resultados, como podéis ver, no son los más deseables, ni siquiera en el caso del modelo de 8.4 pulgadas, que con poco más de 8 horas de autonomía, consigue superar con claridad al de 10.5 pulgadas, que se queda en menos de 7 horas y media. Los datos no son malos de por sí, pero les dejan muy por detrás de sus rivales: la Google Nexus 7 2013 consigue más de 4 horas más que la Galaxy Tab S 8.4 y el iPad Air cerca de 3 horas más que la Galaxy Tab S 10.5. Incluso las Galaxy Tab Pro las superan con claridad.
La situación cambia radicalmente, no obstante, cuando pasamos a las pruebas de reproducción de vídeo, apartado en las que Galaxy Tab S baten todos los récords y se ponen a la cabeza del ranking con comodidad, con más de 15 horas para el modelo de 8.4 pulgadas y unas 14 horas y media para el de 10.5 pulgadas. La victoria de la Galaxy Tab S 8.4 sobre el iPad mini Retina es mayor (más de dos horas y media más), pero también la Galaxy Tab S 10.5 se impone con contundencia al iPad Air (casi una hora más). La distancia respecta a las Galaxy Tab Pro es igualmente significativa.
Buenos tiempos de carga para el modelo de 8.4 pulgadas, no tanto para el de 10.5 pulgadas
En Anandtech nos dejan, por último, un test bastante interesante respecto a los tiempos de carga de las tabletas, algo casi tan interesante como la propia autonomía a la hora de planificar el uso de la tableta fuera de casa. Los resultados en esta ocasión, como podéis comprobar, son bastante diferentes para cada modelo y, si la Galaxy Tab S 8.4 consigue estar a la altura de su rival más directo, el iPad mini Retina, con menos de 4 horas en ambos casos, la Galaxy Tab S 10.5 se queda bastante lejos del iPad Air, con casi 6 horas y poco más de 4 horas, respectivamente.
Fuente: anandtech.com