En los últimos meses, Nokia ha sido objeto de multitud de noticias en portales especializados de todo el mundo. Como os hemos recordado en otras ocasiones, la finlandesa ha atravesado unos años difíciles en los que ha pasado sin pena ni gloria en los formatos de tablets y smartphones. Estas circunstancias han dado como resultado que muchos se cuestionen el futuro de la compañía y que también, los propios miembros de una tecnológica que, en su día fue una de las más potentes del planeta, haya tenido que hacer un esfuerzo de readaptación a un nuevo contexto en el que la innovación, combinada con la competencia y presencia de decenas de actores más, definen el sector de la electrónica de consumo a día de hoy.
Hace unos días os contábamos más sobre los posibles retos a los que tenía que hacer frente la firma y entre ellos, destacábamos precisamente ese esfuerzo por conseguir ofrecer terminales atractivos tanto en coste como en prestaciones, capaces de situarse en un mercado en el que las marcas chinas han conseguido asentarse con fuerza. Hoy, a través de su último dispositivo presentado, el Nokia 6, intentaremos ver cómo la empresa con sede en Espoo, intentará hacer frente a todos esos desafíos pendientes.
Hacia el mercado asiático
A grandes rasgos, podríamos decir que Nokia ha utilizado una estrategia que nos puede recordar al Caballo de Troya. Para ganar terreno desde el momento de su aterrizaje, este dispositivo ha sido presentado en China tal y como recogen portales como GSMArena. Este hecho resulta llamativo si partimos del hecho de que, tal y como os comentamos en otras ocasiones, la entrada de terminales procedentes de compañías extranjeras en el país asiático, está sometido a un marco legislativo muy riguroso que resta atractivo a este mercado a pesar de que sea el mayor del mundo.
La gama media, posible objetivo
Aunque se haya confirmado que durante este año, Nokia lanzará varios dispositivos enfocados en teoría, a casi todos los segmentos, lo cierto es que parece que la finlandesa estaría decidida no solo a entrar en el gigante asiático, sino también, a ofrecer batalla en el sector en el que más podemos ver la saturación o competencia entre firmas: La gama media. Esto se traduciría en el coste del nuevo miembro de la familia, que rondaría los 230 euros. ¿Creéis que esta medida puede ser arriesgada o que sin embargo, supone un acierto?
Lo más destacado
Para conocer mejor cuáles son las cartas con las que jugará la tecnológica durante este año, lo más apropiado también es realizar un breve repaso por las características con las que estaría equipado este terminal. En materia de diseño, nos encontraríamos con una carcasa totalmente metálica en la que el aluminio volvería a ser la protagonista y que intentaría ofrecer robustez sin sacrificar otras especificaciones como el grosor o el peso. En materia de imagen, este modelo se situaría justo en la frontera entre el formato phablet y los smartphones convencionales gracias a un panel cuyas dimensiones estarían entre las 5,4 y las 5,5 pulgadas.
Las prestaciones de imagen se completarían con unas cámaras que alcanzarían los 16 Mpx en el caso de la lente trasera y los 8 en la frontal. Este incremento generalizado en la capacidad de los sensores podría reflejar aquella tendencia que ya pudimos ver en 2016 basada no solo en cámaras duales, sino en la mejora de las características de ambas.
Rendimiento
Las mejoras en ámbitos como la imagen o el diseño, deben ir acompañadas de otras más profundas si se pretende ofrecer un resultado global equilibrado. Una vez más, la gama media ha sido el campo de pruebas de muchas compañías y al mismo tiempo, donde se han visto los mayores avances. En el caso del Nokia 6, esto se traduce en una RAM de 4 GB, acompañada de una capacidad de almacenamiento inicial de 64 que podría ampliarse mediante tarjetas Micro SD. Por otro lado, Qualcomm dotaría a este modelo de un procesador Snapdragon 430 que ya es común dentro de este segmento y que alcanzaría picos de 1,4 Ghz. Este último indicador quedaría por debajo de otros terminales de compañías como Xiaomi que con modelos como el Redmi Pro, también aspiran al trono de la gama media.
Android Nougat, ¿Un valor añadido?
Se abre el debate sobre la cuestión de si Nougat actualmente es elegido solo para los terminales más elevados. En un intento por acercar al último miembro de la familia del robot verde al grueso de usuarios, los de Nokia habrían equipado de serie la versión 7 en su último lanzamiento. Esto podría suponer un avance tibio respecto a sus competidores inmediatos y procedentes de China que, a pesar de incorporar Marshmallow, añaden capas de personalización propias. Sin embargo, esta decisión podría tener algo más de peso detrás, ya que en alguna web se ha postulado la idea de que los finlandeses podrían estar trabajando en el desarrollo de su propio asistente personal.
De momento, solo se ha confirmado la comercialización del Nokia 6 en China pero, ¿Asistiremos a un salto hacia otros mercados? ¿Creéis que este dispositivo marcará realmente el punto de inflexión de la compañía, o pensáis que aún tendrá un camino largo que recorrer para intentar ser competitivo y hacer frente a sus rivales? Tenéis disponible más información relacionada como por ejemplo, los retos a los que deberá hacer frente la firma para que podáis opinar vosotros mismos.