Durante las Navidades hemos hablado mucho de cómo dar con la tablet perfecta para regalar, pero de cara a la nueva temporada que comienza y ahora que el CES 2018 nos ha dejado ya unos cuantos debuts de lo más interesante, os dejamos nuestras recomendaciones para ayudaros elegir qué tablet comprar para vosotros mismos, atendiendo a las que a nuestro juicio son las decisiones fundamentales.
Decidir presupuesto
Es de sentido común, pero es la decisión básica que va a condicionar todas las demás, porque según lo que nos podamos gastar, hay opciones que quedan prácticamente excluidas: el de las tablets de 100 euros o menos es un nicho muy específico de tablets 7 y 8 pulgadas, muy básicas, recomendables para niños y usuarios muy ocasionales; entre unos 130 y 280 euros tenemos las tablets de gama media, Android fundamentalmente (salvo que no nos importe recurrir a la importación); entre 300 y 400 euros tenemos algunas opciones que se salen un poco de lo normal en la gama media; hacerse con una buena tablet de gama alta nos va costar cerca de 600 euros como mínimo y si queremos una Windows de cierto nivel tenemos que pensar en más bien 700 u 800 euros al menos. Siempre está bien estar atentos a las tablets en oferta, pero pocas veces el descuento hace que se salgan de esos rangos básicos.
Decidir cuánto esperamos que nos dure y cuánto trabajo vamos a darle
Al hilo de decidir en qué rango de precios podemos permitirnos movernos, es importante pensar si nos puede convenir gastar un poco más si estamos esperando que la tablet nos dure varios años y sobre todo si somos usuarios bastante intensivos. Hay muchos factores que influyen en el buen estado en el que podemos esperar que se mantenga una tablet (acabados, hardware, actualizaciones… ) y no todas envejecen igual de bien. Aunque las tablets no exigen renovación con la misma frecuencia que los smartphones, tendemos a posponerlo demasiado a veces y no todas están en condiciones de soportarlo.
Decidir para qué la queremos sobre todo
Las tablets son dispositivos muy versátiles, algunas (cada una en su escala) son bastante buenas para casi cualquier cosa, pero ninguna es la mejor en todo, de manera que siempre es interesante pensar de forma realista que es lo que vamos a hacer con ella más o que actividad es prioritaria: ¿tiene que por encima de todo servirnos para trabajar?, ¿queremos la mejor para jugar? O ¿en realidad la vamos a usar sobre todo para navegar y ver series? Algunas actividades tienen unos requerimientos más altos que otras (en hardware, accesorios, etc) y algunas pueden conllevar exigencias bastante específicas, es importante tener claras nuestras prioridades.
Decidir los “extras” que nos interesan
Más allá de uso que le vayamos a dar, cada uno tiene luego circunstancias particulares que nos pueden a llevar dar prioridad a ciertas características, de las que muchas tablets carecen o que hacen que el precio suba bastante. Un ejemplo claro es la conexión 4G, fácil de encontrar en tablets Android de gama media-alta y en el iPad, pero no en tablets Windows o en la gama básica, y que puede encarecer bastante la compra, dependiendo de en qué marca y modelo estemos pensando. Otro ejemplo es el lector de huellas digitales, imprescindible seguramente para muchos que utilizan su tablet de forma individual, pero mucho menos habitual en tablets que en smartphones. Es muy importante también ser consciente de nuestros hábitos y de nuestras necesidades reales en almacenamiento y hasta qué punto necesitamos o no más memoria interna o una ranura para tarjetas micro-SD.
Decidir el sistema operativo
Para los fans incondicionales de uno u otro sistema operativo, está decisión (que está tomada de antemano, de hecho), estará al comienzo de la lista, pero salvo que tengamos una valiosa colección ya de apps y juegos para uno de ellos, que tenga alguna especial importancia para nosotros una características exclusiva de alguno o que tengamos especiales dificultades para adaptarnos a uno nuevo, nosotros os aconsejamos tener la mente abierta y dar prioridad a otras consideraciones. No obstante, como acabamos de mencionar, puede haber circunstancias en que el sistema operativo sea clave para nosotros y, a igualdad de condiciones, hay suficientes diferencias entre ellos aún como para que nos sirvan para inclinar la balanza.
Una ayuda para elegir qué tablet comprar
Para terminar, os recordamos que hace unos meses os dejamos una guía para comprar tablet con recomendaciones generales y de modelos concretos para distintos perfiles de uso y presupuesto, que sigue siendo bastante válida, aunque en los últimos tiempos ha habido algunas bajas (la Pixel C se ha dejado de vender) y algunas incorporaciones interesantes (ya podemos comprar la Miix 520, presentada en el IFA 2017, y también la Lenovo Tab 4 10 Plus y una nueva Lenovo Tab 4 7 Essential, para los que buscan tablets ultra-baratas). O si prefería esperar, podéis echarle un vistazo a lo que sabemos de momento de las llamadas a ser las mejores tablets de 2018.
Y vosotros, ¿a qué dais más importancia a la hora de elegir tablet?