Ni se te ocurra abrir un Surface Go
A menos que seas un técnico cualificado y dispongas de las herramientas adecuadas, no recomendamos abrir un Surface Go. Eso es lo que entendemos tras ver el proceso de despiece de iFixit, donde han tenido que utilizar calor para derretir el adhesivo interno que sujeta la pantalla al resto del chasis. Si todo va bien y consigues despegar el cristal sin romper ninguna de sus esquinas o biseles, desconectar la batería será tan fácil como quitar un simple conector, pero el problema estará en querer retirarla, ya que dos zonas adhesivas la agarran con fuerza al cuerpo del dispositivo.
Suspenso en reparabilidad
La integración y el minimalismo de los dispositivos en los últimos años ha derivado lamentablemente en diseños completamente cerrados que en la mayoría de casos no permiten reparaciones extra oficiales. Cuerpos unibody, baterías integradas, pantallas pegadas al cristal… son elementos que han afinado el aspecto estético de la industria, pero a un alto precio a largo plazo para el usuario, que se ve obligado en muchos casos a cambiar de dispositivo en lugar de repararlo.
El resultado de iFixit con el Surface Go se resume con un rotundo 1 de 10 en su peculiar índice de reparabilidad. Una nota que obviamente quita las ganas de intentar acercar un destornillador al dispositivo en casa. ¡Qué faena!
Sé el primero en comentar