Lo cierto es que el informe, que corrió como la pólvora el día 4 de diciembre, no extrañaba a nadie por los precedentes que hemos vivido este año, con un Snapdragon 805 que se ha hecho esperar hasta el punto de que Samsung tuvo que restringir el lanzamiento de la versión mejorada del Galaxy S5 a Corea en un primer instante.
Según explicaban, el nuevo SoC de Qualcomm, que trabajará a velocidades de 1,96 GHz y tendrá arquitectura de 64 bits, no llegaría a tiempo al primer trimestre por varios problemas técnicos. Uno de ellos afectaría a la CPU, que superaba las temperaturas ideales, llegando a puntos extremos. El segundo estaba focalizado en la GPU, concretamente con los drivers. La gestión de memoria también sufriría de más errores de lo permisible.
Un rumor infundado
Jon Carvill, Director Senior de Relaciones Públicas en la sede de Qualcomm en San Diego, ha sido el elegido para dar las explicaciones pertinentes, que niegan cualquier atisbo de verdad en el informe de la semana pasada. El directivo de la sede californiana explica que no han tenido los mencionados contratiempos el el desarrollo del Snapdragon 810: “Lo que puedo decir es que el Snapdragon 810 sigue su curso y esperamos que los dispositivos comerciales estén disponibles en el primer semestre 2015”.
Esto no quiere decir que el lanzamiento de los terminales no sea aplazado, pero no tiene nada que ver con Qualcomm que según parece, sigue al ruta marcada. La duda que nos asalta ahora, es qué pasa con el Xiaomi Mi5, se habla de una presentación en el CES de Las Vegas (principios de enero) e incluiría Snapdragon 810. Si acabamos viéndolo allí, su lanzamiento podría producirse bastante más tarde.
Fuente: Fudzilla
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